"Mitad arrepentido y encantado, de haberte conocido lo confieso"
Sabina
Yo me levanto así todos los días... Mitad arrepentida, mitad encantada... Con todas las ganas y con una fiaca terrible. Con convicciones y puntos explícitamente titubeantes.
Entre las ganas de portarme mal y las de que me reten cuando hago lio... o por lo menos me amenacen con fuertes represalias.
En el fondo no sé lo que quiero, o no lo puedo sostener. Soy como el rio de Heráclito pero con las decisiones o con las convicciones.
¿Dónde quedó aquella parte de mi que leía a Sartre y Nietzsche?
Perdida seguramente o ahogada en el Rio de las decisiones cambiantes.
Ojalá la encuentre pronto.
Sofia, gracias por pasarte por mi blog. Estuve leyendo un poco tus post y me gustaron mucho, además de encontrar ciertas coincidencias.
ResponderEliminarMe quede pensando en el Debería..me encuentro a menudo haciendo cosas por ese debería o ese deber-hacer..pero por suerte la vida y el mundo están llenos de "sin embargo.." que nos corren del camino lineal y dan respiro al deseo, y las cosas de repente salen "por que si"..y no porque deberían..
Saludos!
Es verdad... Si viera así el mundo sería mas fácil entenderlo.
ResponderEliminarSaludos!